Este oficio requería conocimientos del terreno y de las aguas, pues eran necesarios para la construcción de una balsa o una azud en el rio.
Normalmente se estudiaban las necesidades por parte de un grupo de familias para la hora del riego o a la hora de abrevar el ganado o las caballerías
Las tareas de construcción se hacían en conjunto
Se hacían y se cuidaban con todo el esmero del mundo balsas en terreno arcilloso que el agua se recogía de la lluvia y que se limpiaban por lo menos una vez al año
Se hacían balsetes para recoger el agua de lluvia, eran unos pozos revestidos con piedras que no dejaban marchar el agua y que servían para dar de beber a las caballerías en el verano en tiempos de siega y trilla, también eran cuidados y limpiados y si se agotaba el agua los aguadores lo volvían a llenar
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En Crivillén había muchas balsas y balsetes, que se han ido perdiendo, por falta de uso y reparación, pero aún quedan y como muestra os dejo este de la Valgran lleno de agua
Me comentan que también hay en el Tercerol y en la Vallerma
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